Los carroceros andaluces alertan del retraso de hasta un año en la entrega de camiones
La Asociación Andaluza de Empresas Fabricantes de Carrocerías y Remolques para Vehículos Industriales y de Empresas Fabricantes de Remolques Agrícolas, ANFACAR, integrada en la Federación de Empresarios del Metal (FEDEME), ha alertado de los constantes retrasos, por parte de los fabricantes, de los plazos de entrega de los camiones.
El sector del carrozado de vehículos no ha quedado al margen de los devastadores efectos colaterales ocasionados en los últimos dos años por la crisis de la Covid-19 y, en los últimos meses, por el incremento de los costes energéticos, el desabastecimiento de materias primeras y la elevada inflación acrecentada a raíz del conflicto bélico en Ucrania. Toda esta situación ha sumido al sector del carrozado en una gran inestabilidad.
El trabajo del carrocero de vehículos industriales, en su inmensa mayoría pymes, depende imprescindiblemente de la entrega de un camión en chasis cabina fabricado por empresas multinacionales. La falta de microchips, unida al resto de situaciones descritas anteriormente, han afectado muy seriamente a los plazos de entrega de estos chasis, que ha pasado de unos plazos de entre dos y tres meses, a casos donde se supera el año de espera para recibirlos y de esa manera poder el carrocero adaptarlo a las necesidades del cliente.
En consecuencia, los carroceros no solo tienen que hacer frente a los problemas comunes que están afectando seriamente a todas las empresas industriales actualmente, relacionados con el incremento desorbitado del precio de las materias primas, energía, etc., que utilizan en sus procesos productivos, sino que la demora en los plazos de entrega de los chasis cabina está poniendo en riesgo la supervivencia de sus negocios, puesto que implica, en la práctica, la imposibilidad de realizar una adecuada planificación de su trabajo, afectando al usuario final del camión.
Esta demora se traduce en incertidumbre, puesto que “cuando el cliente solicita un presupuesto para adaptar un vehículo se le dan unos precios, pero para cuando el camión ha llegado los precios pueden haber cambiado, ocasionando tensiones con nuestros clientes y caídas de pedidos”, lamentan desde ANFACAR.
Camiones de energías ¿alternativas?
En los últimos años, los fabricantes están sacando al mercado una mayor oferta de vehículos industriales propulsados con energías alternativas (GLP, motores eléctricos, hidrógeno…), con el objetivo de dar cumplimento a los objetivos y limitaciones fijados en los planes de transición energética fijados desde Europa. En términos generales, estas nuevas tecnologías se ofertan a precios bastantes más elevados en comparación al coste de un camión con motor de combustión, y aunque la demanda va creciendo, los vehículos de energías alternativas resultan aún poco atractivos para los usuarios de este tipo de vehículos.
Así, a día de hoy, ante la demanda de comprar un camión carrozado nuevo que utiliza motores convencionales, los clientes se enfrentan a una total incertidumbre, tanto en plazos de entrega como en precios, que contrasta con una oferta cada vez mayor de camiones con combustibles alternativos, que ofrecen menores plazos de entrega, pero con precios ampliamente superiores al camión convencional.
El sector que representa ANFACAR engloba a las empresas andaluzas dedicadas tanto al carrozado (completado o fabricantes de 2º fase) de los vehículos industriales y comerciales para adaptarlos a su uso, como vehículos industriales o de servicio: camiones basculantes; grúas; portacoches; ambulancias; vehículos de bomberos, etc., como a los fabricantes de remolques industriales y agrícolas. El sector tiene una implantación importante en Andalucía con unas 120 empresas dedicadas a esta actividad, que facturan más 100 millones de euros al año.
Desde su constitución en 2008, ANFACAR se ha convertido en el interlocutor del sector, tanto con la Junta de Andalucía; el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo; VEIASA; laboratorios de reforma y homologación, e igualmente ante el conjunto de la sociedad andaluza.